Rosa y Jaime llevan media vida juntos, desde que se conocieron en el colegio. Son de esas parejas que por más que pasen los años siguen mirándose como el primer día y sienten una profunda admiración el uno por el otro.
El día de su sesión de pareja pasamos una tarde muy divertida en el campo y sabía que su boda no defraudaría. El día comenzó con los preparativos de cada uno en casa sus padres disfrutando de la familia los momentos previos a encontrarse en la Iglesia de los Escolapios. Rosa escogió un vestido precioso de Inmaculada García del que me enamoré en cuanto lo ví.
Fué una ceremonia muy emotiva desde el primer momento donde ninguno de los dos pudieron contener las lágrimas al verse por primera vez. Para celebrarlo, escogieron los Jardines Caballo Blanco en Santa Fé donde disfrutamos de la cena en los exteriores para después pasar a uno de sus salones para el baile donde hubo hasta una entrega de premios Oscar.
